Sentirse útil

Cuando una persona deja de vivir en la calle necesita ocupar su tiempo y darle  sentido. Muchas personas que duermen en la calle han trabajado, algunas de ellas trabajan en la economía informal y otras tienen un trabajo normalizado  pero los ingresos son muy bajos y no se pueden permitir pagar una vivienda.

También hay personas que no podrán volver a trabajar porque vivir en la calle deteriora la salud; puede que no lleguen a ser independientes económicamente, pero sí que pueden hacer cosas útiles para recuperar habilidades y mejorar la autoestima.

¿Y qué hacemos desde Arrels?

Facilitamos la ocupación del tiempo en el taller

El taller de Arrels nació en 2001 para ofrecer a personas que viven o han vivido en la calle un espacio donde ocupar el tiempo y volver a sentirse útiles. Se trata de un espacio reestructurador de la persona que permite también recuperar habilidades personales y sociales, mediante la realización de actividades artesanales: cerámica, carpintería, encuadernación… Durante el 2022, 118 personas han participado en el taller. ¡Descubre nuestros productos en la tienda de Arrels!


Damos una segunda vida a maderas de la calle

Con  una sencilla pieza metálica diseñada por Curro Claret, maderas que se recogen de la calle  y ganas de crear, varias personas sin hogar construyen desde 2010 taburetes, lámparas y otros muebles artesanales.

El proyecto ha recibido premios y ha fabricado piezas para varias empresas.


"Quiero echar una mano"

Cada vez más personas que han vivido en la calle se ofrecen para echar una mano a la entidad. Algunos son mensajeros, otros ordenan el ropero o llevan ropa limpia a personas que conocemos y que están hospitalizadas. También hay personas que colaboran pintando y haciendo pequeñas reparaciones en los pisos de Arrels, mientras que otras ayudan con las tareas diarias del centro abierto, la llar o dan apoyo a compañeros de piso que tienen problemas de movilidad.


"He vivido en la calle y quiero contarlo"

Cada una de las personas sin hogar tiene su historia. Contarla a los demás significa sensibilizar de primera mano, acercar realidades desconocidas y romper prejuicios, pero también ayuda a salir de la invisibilidad y a sentirse útil. En Arrels, un grupo de personas comparten su testimonio con los medios  de comunicación, los estudiantes que nos visitan y a través de redes sociales com twitter.


Hacemos arte para transformar

El arte es un gran motor para el cambio y también un buen aliado para mejorar la autoestima y fortalecer  vínculos. Lo hemos comprobado a través del grupo de teatro, que se encuentra cada viernes para aprender, ensayar y crear pero sobre todo para compartir experiencias, reír y pasar un buen rato. En Arrels también fomentamos la creatividad a través del dibujo, el cine, la fotografía y varios talleres artísticos que permiten ocupar el tiempo de manera útil.


Sabemos que participar es importante

En Arrels, las personas vinculadas a la entidad participan en diferentes actividades durante todo el año: salidas a la naturaleza, visitas culturales, actividades de ocio y también las vacaciones de verano. Son oportunidades para romper la rutina y fortalecer vínculos de una manera diferente.


Sentirse útil con un trabajo

Gran parte de las personas que acompañamos  en Arrels no se podrán incorporar al mundo laboral por motivos de salud o de edad pero, en algunos casos, esta posibilidad sí que existe. Arrels trabaja la inclusión laboral a través de la Fundació Mambré, impulsada con otras tres entidades sociales para promover alternativas laborales y de vivienda.


Velamos por la participación en el equipo directivo

El equipo directivo de Arrels se encarga de dar apoyo al director en las decisiones ejecutivas de la entidad y mira siempre a medio y largo plazo. Está formado por profesionales de Arrels, personas voluntarias y personas que han vivido en la calle. Su experiencia al raso y en el uso de los servicios que ofrece Arrels es imprescindible para mejorar la atención.